“Ciudades saludables, Ciudades felices”.
El lema elegido por UIA este año para celebrar el día mundial de la arquitectura es, sin duda, un tema relevante. El impacto que tiene sobre la salud la configuración de nuestras ciudades es uno de los temas olvidados del urbanismo. Sin embargo es una cuestión fundamental para la calidad de vida de las personas y por tanto para su felicidad y desarrollo armonioso. En algunos países del mundo, resulta una cuestión de supervivencia ya que los elementos urbanos relacionados con la salud son numerosos.
El diseño y la organización de la ciudad influyen en cuestiones como la salud mental, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares, las enfermedades respiratorias, los incrementos de la mortalidad achacables al excesivo frío o calor o las lesiones. La densidad urbana, la calidad de las edificaciones en relación al clima y el diseño y cuidado del espacio público, el ruido urbano, la calidad del aire… son aspectos que pueden influir directamente en la salud. A esto se une el impacto ambiental a diversas escalas que determinados modelos de ciudad están teniendo sobre el medio ambiente.
Si la consideración del impacto del urbanismo en la salud debería ser prioritario en los nuevos desarrollos urbanos, en la ciudad existente es fundamental por el número de colectivos a los que afecta el estado actual de nuestros edificios y nuestras tramas urbanas, siendo evidente que las condiciones tanto de los edificios como del espacio urbano tienen importantes implicaciones en el desarrollo del día a día de las personas.
Los arquitectos, celebrando el Día Mundial de la Arquitectura 2014 bajo el lema “Ciudades saludables, ciudades felices”, reivindicamos la importancia del urbanismo, de la arquitectura y de los arquitectos para conseguir ciudades saludables y ciudadanos más felices. Manifestamos nuestro apoyo a la Red Española de Ciudades Saludables. Consideramos imprescindible una alianza entre todos los agentes que intervienen en la ciudad para poner de relevancia que hay cuestiones que se gobiernan desde intereses muy diversos que tienen un gran impacto en la vida de las personas y en el medio ambiente. Por ello, debemos poner de manifiesto la relación entre ciudad y salud y la importancia que puede tener en la felicidad de las personas y el adecuado desarrollo de una sociedad un urbanismo integrado en el medio ambiente y pensado por y para los ciudadanos.
Estamos convencidos de que la arquitectura y el urbanismo desempeñan un importante papel en la evolución de los territorios y los paisajes urbanos, de los espacios públicos de la ciudad, de las relaciones sociales y de las condiciones de vida de los ciudadanos del siglo XXI, contribuyendo así de manera esencial a la vida cultural y a la identidad de la urbanidad europea.
6 de octubre de 2014
Jordi Ludevid i Anglada,
Presidente
Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España
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