El arquitecto brasileño Oscar Niemeyer ha festejado sus 103 años inaugurando obras real y virtualmente. En su lado del charco, el centenario ideador de Brasilia afirmó en su primera gran felicitación del día que seguir trabajando es su "receta para mantener el interés por la vida" 

En el continente americano inauguró el edificio de la Fundación Niemeyer, ubicado en la ciudad de Niterói, a 13 kilómetros de Río de Janeiro. "El trabajo me distrae, no es un sacrificio. Pienso horas en cada proyecto que hago. Ahora estoy haciendo un acuario dentro del agua. Nunca nadie hizo un acuario dentro del agua", afirmó en relación al Acuario de Buzios, cuyo proyecto prevé una cúpula en forma de pez flotando en el mar donde será construido el acuario inmerso en el paradisíaco balneario brasileño.

Al otro lado del Atlántico, en Avilés (Asturias) el Centro Niemeyer abría sus puertas simbólicamente -hasta marzo no se pondrá en marcha- para celebrar un acto con varios ponentes sobre la importancia de este edificio para lavar la cara de la ciudad. Vicente Álvarez Areces, presidente del Principado, Ramu Damodaran, presidente mundial de 'Impacto Académico' y Taleb Rifai, secretario general de la Organización Mundial de Turismo, han participado en un debate abierto al público.

Con esta excusa, el primer acto que se celebra en el centro -en su cúpula, el nuevo icono de Avilés- ha sido un cruce de visiones. Sobre el antes y después de la ciudad, los posibles efectos turísticos de un centro cultural, anécdotas sobre las visitas de famosos a la ciudad... Un vídeo ha recordado la visita de numerosas personalidades y, en especial, la del cantaor Enrique Morente.

El arquitecto, quien suele festejar sus cumpleaños en casa con su familia, se manifestó complacido por la gran cantidad de invitados que participaron en la inauguración de su nueva obra en Niterói: "Los amigos vinieron a verme, todo esto es muy bueno, es una compensación por mi trabajo".